28/7/13

SIN CURA




"...el problema conmigo es que cuando me piden explicaciones es a pura perdida porque a mí me cuesta mucho explicar cosas que no me las explico ni yo mismo, lo que te puedo decir es como nacieron los Cronopios…yo estaba en Paris en 1952, creo, y fui a un concierto…”

Interrumpí la lectura repentinamente al notar que alguien se sentaba en la silla que estaba del otro lado de la mesa del bar en el que yo estaba tomando un café y releyendo algunos textos que había desgravado para un trabajo de investigación.

Primero miré de soslayo, mantuve un ojo en la hoja y con el otro me asomé fuera de mi mundo de famas a ver que estaba pasando. De pronto mi ojo salió de la línea de lectura y se ocupó, junto con el otro, de ver quien era esa mujer que se acomodaba sin pedir permiso y casi con cierta desfachatez. Mis ojos se abrieron muy grandes, y más grandes aún cuanto mayor era mi confusión y sorpresa.

Pestañeé un par de veces siempre deseando que al abrirlos nadie estuviera frente a mí. Restregué mis ojos con los puños de mi camisa pero cada vez que los abría esa mujer estaba allí sentada.

Gire la cabeza echando un vistazo a la gente que estaba en el local pero todos estaban en sus temas y parecían estar ajenos a lo que sucedía en mi mesa… es que, no se como decirlo...es que esa mujer era yo misma sentada frente a mí! ¿Podés creer? y por favor no me pidas que dé explicaciones porque a mí me cuesta mucho explicar cosas que no me explico ni yo misma. Todo lo que te puedo contar es que desde ese día no se ha apartado de mi lado y que de a poco he debido de ir aceptándola, casi como quien debe aceptar que deberá convivir con una esperanza sin cura.


20/7/13

FELIZ DIA (vale por todos y cada uno de los dias del año)




Feliz día a todos las amigas y amigos amorosamente creativos, a los que hacen que la vida sea mas alegre y a los que cuando se pone triste están para que juntos pateemos las penas.

 

10/7/13

BESOS


El hombre andaba buscando besos y me preguntó si yo tenía.

- De qué tipo?- le pregunté.

- De esos besos que caben en mi boca y que mi boca cabe en ellos. De esos como ciruelas, redondos y suaves a los que si le muerdes despacio la piel crujen y gimen, y cuando los oprimes cuidadosamente se entregan, se abren y derraman un jugo dulce que inunda la boca y escapa por las comisuras hacia el cuello.

Me quedé pensando...