Le pasó la mano por el pelo luego que cerrara la
puerta tras de ella.
Se quedó conmocionado, parecía que había entrado
un hada.
Y él que sólo había visto y esperado el cuerpo de esa mujer, ahora tenía la sospecha de que también tenía alma.
Se retiró unos pasos para poder verla, y se
encontró con una mirada casi de niña, que por momentos miraba sus
pies, o los de él. Se lo preguntaba mientras intentaba saber que hacer con sus manos.
Daba un paso hacia ella pensando en besarla y dos
para atrás cuando no podía sentir más que deseos por seguir mirándola.
La vió tan linda que hasta fantaseó con que era un
holograma y que si estiraba su mano, la misma se perdería en un cuerpo
inexistente.
Respiró fuerte para sentir su olor, su aliento, y no
sintió nada. Ni perfume.
Esa no era la mujer que el había encontrado en el
bar en una trasnoche de alcohol, llorando, arruinada sobre una mesa mojada
de lagrimas y ron.
Esa era la mujer de sus sueños, la que
perseveraba cada noche de pesadillas o desvelo, la que lo abrazaba cada noche
de alcohol y ron, cuando terminaba dormido en el banco triste de una estación
de tren, mientras intentaba subir al vagón para volver a su casa. La que desaparecía cada vez que él despertaba.
Cuestión de encuentros, de esas cosas
extrañas que pasan en un momento entre algunas miradas, un día y sin saber como y por
que, esas personas se ven.
Por fin se ven.
Esto escuchaba mientras escribía algo a cerca de estos encuentros que inesperadamente surgen cuando uno por fín VE.
Los encuentros más sublimes suelen ocurrir siempre sin saber cómo ni por qué.
ResponderEliminarQuizás éso los hace más sublimes.
Abrazo, MAGA-H-
SIL
Casi milagrosos diría...
EliminarAbrazo Sil!
verse no es de todos los días, claro.
ResponderEliminarPero cuando sucede ocurre la magia y también el susto.
abrazo
Y ahí si hay que verse todos los días, justamente para no correr el riesgo de perderse de vista, no?
EliminarAún me resulta una materia pendiente y trato de aprender cada día.
Beso!
Preciosa historia y sugestiva la manera de contarla.
ResponderEliminar=)
Un abrazo!
Gracias Neo, tal vez sea también sugestiva tu mirada.
EliminarEs la forma de mirar que mas me gusta tener sobre las cosas.
Un abrazo!
Muy buen texto! Es un enorme canto al coraje. Porque hay que animarse a VER. Tengo la certeza que existe una buena cuota de circunstancia fortuita, pero sin la predisposición de por medio, quizás la oportunidad pase rozando y se pierda en el laberinto del tiempo.
ResponderEliminarLarga vida al encuentro!
Abrazo grande, mi amiga!
P/D: Me gustó mucho la canción.
No creo demasiado en las circunstancias fortuitas Bee, pero sí, hay que tener coraje para animarse a sacarse la armadura, la venda de los ojos y todo esos pertrechos que se supone nos mitigan el dolor, y entonces sí, ahí uno puede ver.
EliminarNo es fácil, supongo que el texto tiene bastante de esperanza.
Gracias Bee!
Me encantan esos encuentros, esa mirada que se cruza en una noche cualquiera. La noche se olvida, mas no la mirada. UN beso.
ResponderEliminarEs verdad, la mirada no se olvida.
EliminarDOS besos.
Cada uno decide cuándo dejarse ver y por quién...
ResponderEliminarP.D.:Aunque no reculte fácil pasar desapercibido,hay muchísima más gente de la que podríamos imaginar que lo logra!!!
BESOS A TIENTAS
Por suerte GABU...
ResponderEliminarAunque es verdad, no resulta tan fácil.
Besos
Un abismo de la noche al día, dos vidas paralelas, dos caras antagónicas quizá. Ambas conviven a veces sin armonía... Un abrazo fuerte!
ResponderEliminarDe pronto, luces en la noche más oscura.
EliminarAbrazo!
http://www.goear.com/listen/2a2bc13/detras-del-miedo-laura-canoura
ResponderEliminarHermosa!!...Gracias.
EliminarA veces sospechamos que tienen alma, pero suelen ser sólo sospechas.
ResponderEliminarSí, pero suele pasar también que la tienen pero no es la que va con la nuestra.
EliminarEsa cuestión misteriosa, tan lejana a la razón.
Oh! Maghita... a mi que me gustan estos cuentos, que a veces no son tan cuento, cuando una mirada te ve y te ves en ella y sabes que siempre será así.
ResponderEliminarEsa dulzura me puede.
Un abrazo HERMANA!
Que bueno que te provoque estas cosas Cecy!!!
EliminarAbrazo grande.
Lleva mucho tiempo llegar realmente a VER. A veces ni alcanza una vida. Pero qué maravilla es cuando a tiempo vemos lo que siempre hemos tenido delante.
ResponderEliminarSaludos, Magah.
Reconfortante, no?...de esas cosas que no vemos a diario.
EliminarEscuchaba la canción desde tu blog mientras escribia.
Abrazo
Cuando uno esta de resaca, todas estas cosas suceden...
ResponderEliminarjajaja...¿Cómo te diste cuenta Chaly?
EliminarAbrazo
Esa Joanna parece una mujer inolvidable.
ResponderEliminarEnvidia me da.
jajajajjaa, acabo de leer lo de si no leíste no comentes, jajajjajajaja
Toro, Usted leyó?...ah! si si...joanna es inolvidable.
EliminarBeso
Lindo post! Es todo poesia tu relato. Que magicos encuentros. Me gustó la frase "Se quedó conmocionado, parecía que había entrado un hada".
ResponderEliminarsaludos
Gracias Estela. Casi milagrosos los "encuentros"
EliminarAbrazo!
Cada tanto cae un rayo y que no te fulmina, vio?
ResponderEliminarSi Ato, usted tiene razón, y es una suerte, no?
Eliminarqué tranquilidad. todavía me quedan cosas por encontrar.
ResponderEliminarSi Mabel es un alivio saber que siempre hay algo por delante.
EliminarUf!
Ver, que cosa tan facil de decir pero que una gran mayoria entiende por Mirar.
ResponderEliminarMe gusto el texto.
Besote grande.
Gracias Levi.
EliminarA veces miro también. Se hace lo que se puede, no?
¿Sí? ¿Al fin se ven? ¿Es necesario?
ResponderEliminarAcá en el mundo real no tenemos de esas simetrías que abundan en la ficción. Aquí se van con otro y son felices por allá… y uno también.
Siento que si se vieran no lo notarían… incluso si compartieran el asiento del último tren.
Un beso,
D.
Usted siempre rebelde...no le parece que puede ser posible que se vean? Usted nunca vió a nadie? si dice que no, no le creo, y con su permiso!!!
EliminarIgual lo quiero.
Men-can-tó.
ResponderEliminarBesos mostros.
Que bueno! No se por que me parece que usted no es tipo de andar regalando elogios! Y beso.
EliminarUy, qué linda historia disparó Joanna, el hada que nos presentó Rob. Me gustó mucho tu descripción, Magah: que ella se mire tímidamente los pies, que no huela a nada, que parezca un holograma o algo que puede desvanecerse apenas se la toca. Sí, si: así deber ser un hada o una mujer ideal, así de perfecta e inasible.
ResponderEliminarHabría que "ver" que ocurrió después que se vieron...
¿Continuará?...
PS: hablando de ver: veo la foto de Frida en tu blog, levanto apenas la vista y... veo la misma foto en mi panel de corcho. Otra hada, ¿no? Pero muy de carne y hueso, para su pesar y su gloria...
Esas son las hadas que llevamos dentro y que de tanto en tanto y con buena suerte, salen, se dejan ver.
EliminarAbrazo y celebro que Rob no haya dejado vernos!
ah, mire. qué cierto es éso que acabo de leer:"...su capacidad de ilustrar con las letras no la deja en desventaja frente a un pintor." y qué bien VE, ultimamente.
ResponderEliminardejo abrazos. y ganas de verla, compañera.
Usted es mas lindaaaaaaaaaaaaaaaa...y la quiero mi amiga, mi amiga, si?
EliminarEs muy bello el texto, los tiempos en los cuales, uno al final Ve, como lo has descrito. Besos, un placer esta lectura.
ResponderEliminarMire viniendo de usted este halago, me agrando eh?
EliminarBeso y gracias!
escuche, yo habìa escrito una cosita y ahora nostà!
ResponderEliminarpero decìa sobre su mirada y sus veres, y de algunos encuentros.
y de qué bien VE ustè, ultimamente.
y que no se pierda los encuentros!
un abrazo con ganas de verla, compañera.
Una muy buena historia. Ver y ser visto depende de nosotros mismos, pero no es tan fácil. Creo que sucede más en la vida artística que en la real. En la vida real somos más de decir que de hacer, cada vez lo constato más.
ResponderEliminarEn mi caso particular, creo que te diste encuentra en aquella reunión, en persona me gusta ver, pero no tanto ser visto. Artísticamente ni lo digo, es de una obviedad extrema, lo sacás al toque.
Un beso.
HD
En esto también acuerdo con vos Humberto, también en persona me gusta ver más que ser vista, aunque a veces no parezca. El revuelo suele ser una estrategia para que no se vea más que el vestido y nada de adentro. Usted entiende. Claro, hay ojos sagaces.
EliminarBeso
Cuando uno por fin se ve, se desata otro tipo de magia. Los ojos suelen ser fieles a la hora del encuentro. Muy buen escrito.
ResponderEliminarUn saludo.
Es verdad, suele resultar cuando nos sacamos la máscara. A usté jamás lo hubiera "visto".
EliminarBesos enmascarados!
Ey, no veo mi comentario, ¿me están censurando?
ResponderEliminarJamás!
EliminarDichosos los que la puedan ver.
ResponderEliminarBesos
Sí, es cuestión de abrir los ojos...digo, el corazón, lo cual no suele ser tan fácil
EliminarBeso
buèh..........se ve que he sido impaciente!
ResponderEliminary cherente, por suerte.
abrazos!
coherente, dice ahi.
ResponderEliminarotro abrazo
Besos coherentes y nos vemos!!!
Eliminar