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El se mantiene inmóvil mientras la abraza. De repente su cuerpo cobra tensión, en el preciso instante, como repelida, ella lo suelta, se retira un paso hacia atrás.
Un puño apretado rompe sobre su boca, la tira al piso con el golpe. El la insulta, le arranca la ropa sin que ella pueda detenerlo. Se le tira encima y mientras la sigue insultando la besa. El rostro y la mirada se le hacen de hielo. La vuelve a golpear, otro puño cerrado al estómago. Ella se ahoga. El limpia con su mano el hilo de sangre que cae de su boca. Levanta el brazo y lo deja caer pesado sobre su cara, que como un latigazo gira sobre el piso hacia un lado. Ella intenta salir de entre su cuerpo, se aleja reptando de espaldas por el piso, el la deja irse, la mira. Cuando queda su pierna al alcance de su mano, la toma por el tobillo y aprieta fuerte.
EL:
Maldita hija de puta. Mentirosa.
Aprieta los dientes. La cara se le impregna de odio. La mujer trata de alejarse y le grita
Ella:Esto se termina.
El lleva la vista hacia el puño que envuelve el revolver, ve los movimientos leves de los dedos que se ubican para accionar el gatillo, se incorpora, aun sentado en el piso, mientras ella levanta el brazo.
Ella:Maldito hijo de puta.
El revolver se eleva en el aire de la mano de la mujer, que llora desconsolada. El pecho se le contrae del llanto. El mira el arma en su mano y luego la cara de ella desfigurada, otra vez el arma y otra vez su cara.
El arma apunta a la cabeza del hombre sentado en el piso, inmóvil, mudo, que no deja de mirarla a los ojos.
Un puño apretado rompe sobre su boca, la tira al piso con el golpe. El la insulta, le arranca la ropa sin que ella pueda detenerlo. Se le tira encima y mientras la sigue insultando la besa. El rostro y la mirada se le hacen de hielo. La vuelve a golpear, otro puño cerrado al estómago. Ella se ahoga. El limpia con su mano el hilo de sangre que cae de su boca. Levanta el brazo y lo deja caer pesado sobre su cara, que como un latigazo gira sobre el piso hacia un lado. Ella intenta salir de entre su cuerpo, se aleja reptando de espaldas por el piso, el la deja irse, la mira. Cuando queda su pierna al alcance de su mano, la toma por el tobillo y aprieta fuerte.
EL:
Maldita hija de puta. Mentirosa.
Aprieta los dientes. La cara se le impregna de odio. La mujer trata de alejarse y le grita
Ella:Esto se termina.
El lleva la vista hacia el puño que envuelve el revolver, ve los movimientos leves de los dedos que se ubican para accionar el gatillo, se incorpora, aun sentado en el piso, mientras ella levanta el brazo.
Ella:Maldito hijo de puta.
El revolver se eleva en el aire de la mano de la mujer, que llora desconsolada. El pecho se le contrae del llanto. El mira el arma en su mano y luego la cara de ella desfigurada, otra vez el arma y otra vez su cara.
El arma apunta a la cabeza del hombre sentado en el piso, inmóvil, mudo, que no deja de mirarla a los ojos.
Ella
Bastaa!
El se pone de pie, cerca de ella, que aún permanece en el piso. Ella se abraza a una de sus piernas, con todo el cuerpo, fuerte, con impulso lo tira al piso, lo deja boca arriba y se sube a él que deja muerto los brazos a sus lados, sobre el piso. Ella golpea su pecho, una y otra vez.
Ella:Te odio, te voy a matar, maldito hijo de puta. Me dejas muda, y yo solo quiero hablar. Hablar, hablar, que por una puta vez escuches.
Ella se ve agitada de dar golpes sobre su pecho con los puños cerrados, el ataja sus manos, se cubre la cara. Deja de pegarle, y en un movimiento rápido se pone de pie. Camina dando pasos hacia atrás, sin dejar de mirarlo tendido en el piso con las manchas de su sangre en el pecho y en la cara. El quieto, le mira las piernas desnudas que se van alejando.
Ella se acerca a la pared, queda apoyada, respira. Cierra los puños, levanta el brazo y con violencia barre los libros que están sobre la repisa al lado suyo. El sigue tendido en el piso sin dejar de mirarla. No se mueve. Ella también sin dejar de mirarlo, toma un arma que queda a la vista sobre la repisa.
El se pone de pie, cerca de ella, que aún permanece en el piso. Ella se abraza a una de sus piernas, con todo el cuerpo, fuerte, con impulso lo tira al piso, lo deja boca arriba y se sube a él que deja muerto los brazos a sus lados, sobre el piso. Ella golpea su pecho, una y otra vez.
Ella:Te odio, te voy a matar, maldito hijo de puta. Me dejas muda, y yo solo quiero hablar. Hablar, hablar, que por una puta vez escuches.
Ella se ve agitada de dar golpes sobre su pecho con los puños cerrados, el ataja sus manos, se cubre la cara. Deja de pegarle, y en un movimiento rápido se pone de pie. Camina dando pasos hacia atrás, sin dejar de mirarlo tendido en el piso con las manchas de su sangre en el pecho y en la cara. El quieto, le mira las piernas desnudas que se van alejando.
Ella se acerca a la pared, queda apoyada, respira. Cierra los puños, levanta el brazo y con violencia barre los libros que están sobre la repisa al lado suyo. El sigue tendido en el piso sin dejar de mirarla. No se mueve. Ella también sin dejar de mirarlo, toma un arma que queda a la vista sobre la repisa.
Ella:Idiota, jamás te hubiera hecho daño, nunca supiste lo que te quise.
El brazo de la mujer está tenso y tembloroso en dirección a él.
Ella:Bang!
El cierra los ojos. Al instante los abre y ve el brazo que se desvía, se apoya en la sien de ella y dispara.
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Lo quiso tanto que ella se quito su vida, mientras la imagen lo mata a el.
ResponderEliminarImpresionante!!!
Besos.
Joder, que fuerte.
ResponderEliminarTe pasaste con el final.
El muerto debía ser él.
Castigada!!!
Besos.
Final lamentable!!
ResponderEliminarMe gustan los finales felices maguita.
Un abrazo cielo
Ella se impuso pues doble castigo. Él no sufrío entonces...
ResponderEliminarEn ese tipo de relaciones tortuosas, suele ocurrir que a pesar de todo, los protagonistas SE AMAN !!
ResponderEliminarElla terminó su calvario, quizás estaba tan destrozada psicológicamente que con la muerte de él no alcanzaba...
Quizás él ahora, comience su verdadero peregrinar de dolor y remordimiento, que a veces si se potencian, ES PEOR castigo que la muerte.
La muerte es sólo la suerte, con una letra cambiada, como diría mi amado Joaquín ...
GREAT !!!!!!!!!!!! MAGA SIN HACHE.
Impecable su saga.
A Neto le va a encantar... :)
Besos todos.
SIL
Muy buena saga. Yo creo que el incidente termina con dos vidas, de una manera distinta, claro está, pero no hay sobrevivientes.
ResponderEliminarUn saludo.
No estoy de acuerdo con parte de los comentarios.
ResponderEliminarEl desarrollo del relato es impecable.
Al leerlo tenía contraido el pecho de la tensión.
Un "excelente" Magah.
Por cierto...no todos los finales pueden ser color de rosa.
Solo hay que darse un paseo por nuestros recuerdos...
Salu2
Desgarrador Magah tenso hasta el final, un desenlace terrible pero creo que si lo hubiera matado, ella tampoco habria vivido, al menos asi se libero de una buena vez.
ResponderEliminarP.D: Si yo fuese ella primero lo mato y despues veo que hago, dudo que el entienda el sacrificio de ella llego hacer.
Mis congratuleishon exelente saga muy bien llevada.
De paso te linkeo no sea cosa que se me pierda uno de tus escritos.
ResponderEliminarCuando no se puede más, pero se ama, esa es la salida.
ResponderEliminarMiedo me das.
Es seguro que para ÈL el infierno recièn comienza!!!
ResponderEliminarP.D.:Me duele sentir que en cada golpe ELLA perdìa las mismas ganas de vivir... :(
BESITOP
Muerto el perro se acabó la rabia. Ojalá te lea Kristina.
ResponderEliminaruff! que bueno magah! me encanto la saga! y también eso de hacerle sombra al sol!
ResponderEliminarBeso!
Totalmente impresionante. De principio a fin. Heroico!
ResponderEliminarUn escrito de mucha tensión...
ResponderEliminarMe gusta como escribes.
Un beso, Magah.
Joder! menudo final!!
ResponderEliminarEstoy acojonado, porque eso, realmente pasa ;((
Besos valientes
Imagino que la decisión del final, era la única que hizo que su sufrimiento -realmente- terminara.
ResponderEliminarExcelente final, muy buena y dolorosa historia!!
Abrazotes!
Me parece muy interesante -y central- el momento en que ella, en medio de insultos y amenazas confiese lo que quiere: sólo hablar, ser escuchada.
ResponderEliminarFuerte el sentimiento y la impotencia. Fuerte el Final.
Fueron levantando la apuesta hasta que finalmente no queda ni el juego.
Muy bien Magah! Hay amores...
Un abrazo guapa!
buee...no soy especialista de nadaaa...pero me encanta que la gente no reciba de quiene escribee lo que espera como obviedaddd..
ResponderEliminarbravo por essoo..!!
me parecio un finalll..de veras fantasticoo...!!
me encanto leerteeeee..!!
mi cariñooo entregado en manoooo..!!
pd..por favor tuteame..eso de tratar de udd..me momificaaa..y todavia me faltan unos meses pa esoo..!
Magah estás hecha una guionista genial! me encantaría que los próximos tuvieran que ver con el amor, con la vida y por ejemplo, la seducción ó el conocmiento de dos personas en forma incidental. Besos
ResponderEliminarMagahita, muertos ambos por amor y desamor al mismo tiempo, sea como fuere, ya te dije que tus cuentos son la película que algún genio pronto ha de rodar?
ResponderEliminarApasionante muchacha
Estercita
Impecable: no me esperaba para nada el final...y eso es lo mejor que me puede pasar como lectora. Felicitaciones!!
ResponderEliminarMuy bueno realmente, uno siente la tension del ambiente y si me permitis te digo que ambos terminaron muertos en esa escena. Amores enfermos diría, un beso
ResponderEliminarEl espíritu asesino hizo estragos doña Magah! Y voló sangre al final, pero que sorpresa, un buen giro, un gran final.
ResponderEliminarExcelente incursión en estos terrenos!
la mate porque la queria....
ResponderEliminarjajaja
1 beso Magah
PD. las foto de los pies en pareja esta buena!!!
Porque Así tambien se ahorra, desodorante.!!!
ante los comentarios...
ResponderEliminaryo creo que el la mato antes q ella se matara.
espero q valga la aclaración!!!
Preferimos los finales felices, si nos dan a elegir. En fin, la vida se encarga de decirnos a cada rato, que las cosas muchas veces terminan de esta manera...
ResponderEliminarSaludos, que estés muy bien.
Muchas Gracias Total
A veces pasa y Crónica se encarga de dar la noticia. Es mas, creo que tu relato es un reflejo de algo que hasta por cotidiano nos parece normal...
ResponderEliminarA veces me pregunto como se puede querer tanto, porque mas allá que sea una historia que puede ser real o no, es tan posible, tan cotidianam tan que nos pasa a algunos, y me pone totalmete perpleja, que es lo que nos hace apegarnos a quien no ama con amor, a quien lastima... que nos impide cerrar una puerta, dando un portazo o suavemente, pero irnos de ese lugar donde no recibimos lo que esperamos.
ResponderEliminarno llegaría al punto del final, pero lo entiendo. Y es terrible.
Muy bueno el cuento.
un beso
Bueno…, la ambivalencia (amor-odio) sobre la misma persona – como te mencioné en otro capítulo de esta zaga – es aceptado por la psicología como un sentimiento normal.
ResponderEliminarAhora…, esto de llevar a la conducta concreta la fase de odio agrediendo al objeto, o como en este caso, autoagrediéndose, ya es un signo de psicosis…; por lo menos de una personalidad borderline.
El cometido de ella, esta logrado…, y el tuyo también con el sadismo que alguna vez te señale que te caracteriza; y es dejarnos a todos con la intriga de qué carajos quería decirle al tipo cuando narras:
“Ella:
Te odio, te voy a matar, maldito hijo de puta. Me dejas muda, y yo solo quiero hablar. Hablar, hablar, que por una puta vez escuches.”
Tal vez el próximo escrito podría llamarse: “Lo que la muerta hubiese querido decir…, y no dijo”
Besos Genia!!!
Rik
DIOS!!!!!!!! WOW!!!! quede sorprendido Magah!!! es exelente... es una historia en al cual nos damos cuenta que amar es verdadero, si ella le quitaba la vida a es aceptado tambien porque ella ya estaba cansada.. pero al ver que es por amor... muestra comoe s amor de los puros!!! Magah!!! te aplaudo amiga... eprdon por llegar tarde.. pero llegué... un fuerte abrazo!
ResponderEliminaruuuuuuuuhhhhhhh. buen final. viste que ahora se viene la movida del cine interactivo??. la historia es así. vas al cine y no apagás el celu, de golpe en una escena agarra un telefono alguien de la pantalla y te llama. a vos en el cine...y empieza a hablarte. Entonces te pregunta cosas y hace lo que le aconsejas...
ResponderEliminarbue, esto tiene mucho de cine. si me preguntabas al celu que hacer? le hubiera disparado al tipo sin matarlo, errando el tiro.
buenisimo el cuento.
besos,
Fuerte y letal. Contundente, duro, real.
ResponderEliminarGracias por pasar!
Muy bien escrito. El final es insuperable.
ResponderEliminarTe dejo un abrazo.
Y me llevo tu link.
He conversado sobre suicidios pasionales con alguien que entiende del tema algo más que yo. Me inquietó su aseveración de que suicidarse es el impulso de matar a quien se quiere castigar pero quererlo tanto que se prefiere matar a uno mismo.
ResponderEliminarTremenda manera de relatar, de manterme inquieto hasta el punto final.
D.
No sé si ella hace bien o mal, quizá sólo lo que puede hacer: de todos modos lo ha condenado sin remisión posible. Un afectuoso saludo. La escena es muy vívida. Enhorabuena por ello.
ResponderEliminarBrillante saga, dolorosa, los finales felices no son la regla.
ResponderEliminarMe encantó.
Besos