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La luz del mediodía pega sobre el vidrio de la ventana y se mete amarillenta y calida en la cocina. Sabina, cerca de la mesada, solo vestida con una bombacha blanca, vierte leche en un recipiente. El sonido de una respiración próxima la saca de sus pensamientos. Ve de reojo que la mira desde la puerta, viste solo una bombacha. Enciende la cocina y pone el recipiente al fuego. Ella no se mueve, solo la mira. Sabina espera ver sobre la superficie las burbujas que indiquen que el líquido blanco toma el primer hervor. La piensa, la ve mirarla, le gusta saberla ahí. La excita su presencia. Mientras revuelve, vuelca el azúcar como una leve lluvia. La siente detrás suyo, ahora la piel a escasos centímetros le irradia calor. Siente sus pezones provocando su piel. La leche burbujea en cámara lenta. Siente su mano delgada que le corre el pelo hacia su pecho, suave, tierna. Va agregando el arroz a cucharadas, una tras otra y entre una y otra le va besando la espalda desnuda, dulce. El vapor blanquecino se entremezcla entre las partículas del haz de sol. El espeso hervor va tomando el aroma de la vainilla y mientras se arremolina en su melena roja, Sabina se deja besar mas allá de su espalda, donde sabe la canela.
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oloroso y rico!!! Canela, donde esta ella estoy yo! besotes
ResponderEliminarVainilla.
ResponderEliminarComo mi último perfume...
Che, ésto intimida...
ResponderEliminarYo desayuno tres litros de café con leche a ¨monitor abierto¨...
Lo único que me identifica con esta dulce Sabina, es que lo hago mientras escucho a Joaquín.
Habrá que rever algunas situaciones !!
;)
Beso inmenso, dulcísima maga sin hache.
SIL
LO DICHO!
ResponderEliminardejó las cartas y se llevó las alas!
maga, esa chistera esta llena de sorpresas y esto sigue siendo perfecto!
abrazos, compañera!
En el hervor de esas miradas hay una burbujas de mucha sensualidad, con olores que envuelven.
ResponderEliminarMe gusto muchisimo el texto.
Abrazote.
Uau Magahita, este relato es aromático y casi palpable!
ResponderEliminarMuito quente!
Estercita
Vengo de la canela de mi blog a la canela del tuyo. Qué texto, nena! Muuuy bueno!
ResponderEliminarBesitos.
Se me empañó la pantalla del monitor...
ResponderEliminarSalu2
Que calorcito más rico.
ResponderEliminarBesos.
...?
ResponderEliminarOloroso y erótico tu relato! jejejeje...muy sugerente.
ResponderEliminarGol!
ResponderEliminarMuy sugerente. Se huele el momento.
ResponderEliminarUn abrazo.
14! (no creo en brujas, pero....)
ResponderEliminarMuy sensitivo, me ha gustado eso de mezclar aromas y sensaciones es maravilloso.
ResponderEliminar¡Qué arroz con leche mas sensual!
ResponderEliminarBesos.
hablanos más de la bombacha
ResponderEliminarArroz con leche y canela: Hummmm.
ResponderEliminarMmmmmmm... Me arriesgarìa con un touch de coco tambièn...
ResponderEliminarP.D.:En esta tarde càlida hasta me es posible percibir esa mezcla de aromas sabrosos y excitantes!!
BESITO AROMÀTICO :)
Arroz con leche... que abre la puerta para ir a jugar. Y qué juegos, Magah!
ResponderEliminarArroz con leche... ¡¡que rico!!
ResponderEliminarUn post con sabores, olores y sensaciones muy especiales!!!
Abrazos!
juro haber olido canela.. una mezcla magnifica de sensaciones y olores que solo una magah puede lograr... precioso relato
ResponderEliminarArroz con leche es una mezcla diferente, que se come fria, pero cuando llega a la canela quema...
ResponderEliminarExclente escrito. Una obra muy olfativa.
ResponderEliminarUn saludo.
Otra que Utilísima!
ResponderEliminarMe acordé del post de Steki...me parece que se le pasó una "receta" con canela a nuestra Amiga!
Abrazo Magah!
¡Qué exquisitez! Anunciar todos los apetitos y preparar el dulce a fuego lento es tan placentero que ya ni parece justo.
ResponderEliminarUn delicado banquete sensorial este relato.
D.
Magah.... ehhhhh hola.
ResponderEliminarVeo cambios por acá... o es idea mía?
Bello texto.
Un fuerte abrazo, cuidate mucho.
Besos, magia y luz.