-

-
L recibe un mensaje de texto:
“Hola, ¿venís mañana?”
L, mira el número, no lo conoce, no lo tiene en su agenda. Guarda el teléfono y lo olvida.
Al otro día el número desconocido insiste en la invitación.
L responde: “Hola. No se quien sos”
Respuesta: “Perdón, era para otra persona”
L lee, cierra y vuelve a olvidar.
Minutos después, otra vez el número desconocido: “Hola L, soy Dai, estaba con el teléfono de Mister”
L se esconde tras sus manos para ahogar la risa.
“Mister…otra vez te están espiando el celular… - piensa L entre sonrisas -Uf! podría haber pisado el palito, veo que tenés teléfono nuevo”
L responde: “Hola Dai”
Número conocido: “Dale, veníte y cenamos los tres”
L reserva su respuesta, sigue controlando su risa, escondiéndose de los amigos que la ven tentada e incrédula de lo que pasa por su teléfono.
Horas mas tarde L contesta: “Lo dejamos para otra oportunidad. Gracias” Respuesta: “Sí y le damos una sorpresa”
L sabe que hará todo lo posible por que Mister tenga su sorpresa, se le hace agua la boca. Cree que Dai también hará lo suyo para propiciarla.